Desde hace meses, esta semana pintaba para ser redonda en Guadalajara en cuestión de conciertos. Desde la visita de grupos de metal extremo como Napalm Death hasta la revancha de Tricky luego de un concierto que fue dolorosamente cancelado en su momento; pero sin lugar a dudas dos de las propuestas más frescas de la actualidad: King Gizzard and the Lizard Wizard y Parquet Courts llamaban poderosamente la atención. Luego de dos días de la estupenda presentación del primer grupo, era ahora el turno de la banda de Brooklyn de demostrar porque es una de las bandas más importantes de la actualidad.
Hubo dos bandas abridoras esta ocasión: la muy joven banda Velouria, la cual no alcancé a escuchar, pero según algunos amigos que habían estado por ahí más temprano, me comentaron que la propuesta era bastante buena, con un sonido potente y una presentación en general bastante sólida, en su mayor parte instrumental; el único pero que comentaron fue que era difícil escuchar las palabras del cantante en ocasiones; espero pronto tener la oportunidad de escucharlos. Aunque alcancé a llegar a la hora que tocaba Par Ásito, esta ocasión y dado que había abierto el concierto para King Gizzard (y donde si vi completa su presentación), preferí salirme y encontrarme con varios amigos que por ahí andaban. La banda es buena y tiene mucho potencial, pero si me extrañó un poco que repitieran con un par de días de diferencia como abridores, aunque al final es bueno para ellos que tengan esa exposición dada su interesante propuesta.
Pasadas las 11 de la noche, los neoyorquinos tomaron pausadamente sus instrumentos mientras saludaban al público, levantando los alaridos de los presentes. La banda no se guardó nada. Desde el tema inicial “Total Football” marcaron el tono de hacía donde iría el concierto: potencia, energía y un público entregado totalmente a la música. La explosividad del grupo se hizo presente en todo momento con temas del calibre de “Almost Had to Start a Fight/In and Out of Patience” o “Normalization”, aunque se valieron igualmente de momentos más tranquilos, moderando sabiamente los beats cuando era necesario, con temas como “Before The Water Gets Too High” o “Freebird II”. Por otro lado, momentos tan divertidos como en la contagiosa “Wide Awake” no quedaron fuera e hicieron bailar a todo el público.
Parquet Courts es un grupo que ha ido creciendo y madurando su propuesta, dejándonos sobre el camino varias joyas discográficas, pero considero que es de esos grupos que no has terminado de vivir la experiencia completa si no los ves en vivo. Su propuesta crece y se redimensiona a otros niveles al experimentar los buenos músicos que son, lo compenetrados que están y el dominio de los tiempos que tienen durante el desarrollo de su show. Mención aparte merece el sonido del que hacen gala, exacto y muy bien balanceado, cuestión que siempre es tema de conversación con un grupo de amigos que es de los elementos que a muchos grupos mexicanos les hace falta cuidar más para alcanzar un nivel más alto, amén de su calidad instrumental.
Cada uno de los integrantes hace su parte para hacer del directo algo redondo y memorable, desde las guitarras de Andrew Savage y Austin Brown (quien cada vez más parece un híbrido entre Thurston Moore y Paul Dano) hasta el bajo de Sean Yanton y las detalladas percusiones de Max Savage, y esto se demuestra en todo momento, con especial énfasis en el espectacular cierre que tuvieron. El concierto duro alrededor de una hora con quince minutos lo cual pudiera parecer poco, pero ante grupos como estos (King Gizzard duró un poco más solamente) no se puede pedir más (ninguno de los dos tuvo encore) pues la energía, entrega y potencia que ofrecen no se da todos los días.
Al final me preguntaron algunos amigos que cual concierto me gustó más: difícil decidir; creo que los dos fueron tremendos y aunque es cuestión de gustos, creo que algunos ingredientes que lo hacen ligeramente más memorable es la cercanía que se tuvo con el grupo al ser un lugar más pequeño, situación que ayuda a crear una mejor vibra y comunión si el público responde por igual a lo que es escucha (el caso de este concierto). Otro apunte personal, es que King Gizzard cumplió cabalmente mis expectativas y Parquet Courts las sobrepasó, aunque esto es totalmente relativo.
Más semanas como esta.
**Imágenes por José Manuel Jasso**