Red Industrie & Octopus en concierto

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Darketa travesía en las industrias rojas

*Fotografías por cortesía de Adriana Armenta. Crónica a dos manos por Adriana Armenta y César Zavala.

El pasado 8 de junio, tuvimos un evento con dos bandas de culto y que hay que escuchar, Red Industrie y Octopus, el recinto: el bar Red Rum en GDL.

El lugar es una típica cantina abandonada con unos grandes ventanales que dan hacia la calle. La noche la abre un duo dj que llena el espacio sonoro con sonidos y ritmos oscuros con bandas como Front 242 aderezando la velada.

Comienza después de un par de horas los esperados Red Industrie, quienes ya han dado conciertos en Perú y otras latitudes. Duo conformado por el vocalista y fundador -también dueño de un bar legendario que se llamaba Repúblika ubicado por el parque rojo, y reubicado por la zona de chapalita.- y un excelente guitarro.

Abren su show con “Past Masters”. Enigmática y con buen punch de arranque, como de motores pesados. En su segunda canción “Forward” no pueden terminar porque se les funde la compu así que el guitarro acomoda un final abruptamente. Cambian de dispositivo, y a continuar.

El guitarro es un jovenzuelo. Trae sus fans igual de jóvenes, pero el 80% del público es old school. Canas y estoperoles por doquier. La voz es seca y los lentes de policía son el uniforme en el vocalista. El teclado mese a los presentes en una darkótica onda expansiva de hipnosis. Darketismo hipnótico.

“Change the Weather”. Bajo fuerte y dominante, percusiones a la par, y voz que grita «you can change the weather». Rola más rítmica pero a la vez mas profunda.

Rola mas densa, “Burning Loneliness”, distorsiones más abarcadoras y preocupantes. Nos baña con ciertas frases de urgente loneliness. ¿Recuerdan al brother de la película de Pulp Fiction que tiene la tienda de empeños y luego le marca a Zed? pues aquí está su «mini me«.

“(D)ark angel». Movidona con temática sufridora bíblica.Y llegaron los darketooos, pienso yo con la voz de patricia de Bety La Fea, mientras veo arriba al crew más pesado de la noche: tatuajes por doquier, bolsos con pentagramas así como en los escotes. Cabelleras plata diabólico.

Ahora se coverea a Clan of Xymox con “Goin Round”. El chavo guitarro se discute en el éxtasis guitárristico. El vocal hace un interludio para adorar a su novia.


“Nanopartículas letales” sigue. Rompedora, escándalo para despertar. Ahora invitan a Jesse Eddie de Octopus. “New Crusade”. Esa rola es mas movida y melódica que las demás. Suena penetrante, lenta y suave.

“Twister for you” suena más rítmica, pero alucinante. Nueva rola del nuevo disco Anti Sistema. Esta rola prende al compita súper Alucard, extra serio en la penumbra, con cabello hasta la cintura que hasta ese momento había guardado la compostura escondido entre el público. «Renuncia a tu empresa, sé independiente del orden mundial» se escucha.

Cover de «Pain» de Boy Hasher. La banda se prende y los gritos no se hacen esperar. Chaqueta de mezclilla con la frase digital rainbows trae un chico que sin duda actualiza el ambiente con su juventud y la de sus acompañantes.

Como no somos famosos, no nos vamos a ir al camerino para que nos griten «otra» dice el vocalista, antes de culminar con su última rola. Rola super movida. Es “Ctrl Obey Conform”. Guitarra profundizando en la frase principal. Distorsión final. Océano de fuerza. Cierran con una guitarra tremenda, seduciendo al bajo y la frase «despierta ya, wake up, come on». En la última rola se quita los lentes obscuros y luce unos ojos azules insospechados.

Después de haber concluido la presentación de Red Industrie, llegó el turno de Octopus, banda de culto quienes se definen entre una mezcla de rock y electrónica; a mi parecer fue como una mezcla entre Depeche Mode y Fad Gadget.

El dúo nos ofreció un espectáculo con música con tintes industriales, y un toque de glam. La seductora presencia del vocalista Jesse Eddie junto al guitarrista Víctor Barajas nos brindaron una excelente noche que a pesar del calor, se disfrutó al máximo.

Hubo una conexión inmediata entre la banda y el público. El vocalista, con su expresividad apabullante, nos hizo bailar con sus canciones. También bajó varias veces del escenario para integrarse con el público mientras cantaba y bailaba. El público reaccionó positivamente a la presencia de los músicos, quienes demostraron una energía espectacular, que realmente se notaba que se estaba disfrutando del show.

Cerca del final, el ambiente se volvió más íntimo y lleno de sensibilidad donde la banda se apoderó del escenario con una apasionante presentación. Octopus es una joya de la escena local underground de Guadalajara que todos deberían de conocer.

Sin duda fue una gran presentación de estos grandes músicos. Desearía más noches así, quizás dejando a un lado el calor, pero igual de increíble, y con este tipo de música. Recuerden, si escuchan sobre esta agrupación no duden ir a verlos. No se arrepentirán.