El sexto trabajo discográfico de Pulp se publicó un 30 de marzo de 1998, el final de una gran década para la música y el rock. Los dos grandes mercados, Europa y Estados Unidos, se encontraban en una especie de resaca musical (los estadounidenses por el grunge, los europeos por el britpop) y en los listados de popularidad podías encontrar más boybands y conjuntos de R&B que grupos de rock o similares; el público en general ya no quería que le recordaran cómo es la vida y solo querían sonidos alegres, historias de romances veraniegos adolescentes. En ese contexto reapareció Pulp, tres años después de haber publicado el álbum que los puso en el radar mundial y que se convirtió en el himno de todos los que tenemos que trabajar para sobrevivir: «Different Class». La expectativa por «This Is Hardcore» no podía ser mayor, el britpop ya solo contaba con Blur y Oasis como estandartes del movimiento y ni ellos querían seguir siéndolo, la gente esperaba más analogías y comparaciones del mundo real con el mundo fantástico que la televisión y el cine de aquel entonces le mostraban a las masas; la manera en que «Different Class» logró describir cómo era la vida de los protagonistas de las canciones fue la razón por la que resonó con esa magnitud y seguirá siendo uno de los análisis musicales más exactos y celebrados.
Las grabaciones comenzaron en 1997 en CTS y Olympic Studios, después de una época tumultuosa con historias de tabloides, adicciones, rupturas amorosas y Russell Senior saliendo del grupo; la producción fue responsabilidad de Chris Thomas, quien ya había trabajado con artistas como The Beatles, Pink Floyd, Queen, Procol Harum, Roxy Music, Badfinger, Elton John, Paul McCartney, Pete Townshend, The Pretenders, Sex Pistols, INXS y Human League. Ya habían lanzado «Help The Aged» en noviembre de 1997 y «This Is Hardcore» el 9 de marzo de 1998 como sencillos, solo por las letras ya se sugería que Jarvis Cocker estaba siendo más introspectivo, desenamorado de la fama y de ser el centro de atención, era probable que el álbum sería aún más serio y «oscuro» que trabajos anteriores. Pero, conociendo a Pulp, la seriedad para ellos nunca fue más que un vehículo, un modo más de «storytelling» y de alguna manera lograban encontrar sarcasmo y honestidad para ponerte en el momento, en el lugar, en la situación y sobre todo, para hacerte sentir parte de la canción y no solo como un espectador.
Y llegó el 30 de marzo de 1998, llegó «This Is Hardcore» a las tiendas y después a más de 86,000 hogares, logró nominaciones al Mercury Prize, los críticos lo consideraron el último gran álbum del britpop y los fans logramos encontrar dentro de nosotros mucho de lo que las canciones hablaban, logramos identificarnos y cantar nuestros problemas al mismo tiempo que Jarvis Cocker. Una vez más, Pulp lo logró.
El álbum abre con «The Fear», una canción que más o menos logra romper con la «fourth wall» y habla de sí misma a la vez que logra conversar con el espectador, la canción te conoce y sabe de tus ataques de pánico, de tus miedos, de las veces que te cuesta trabajo salir de la cama por ese miedo que ya ni sabes exactamente cómo es o dónde se localiza, la canción sabe que solo te interesa una vida en la que no tengas que estar pasando por los mismos problemas innecesarios y absurdos, que ya solo quieres «Just some kind of life with the edges taken off».
La segunda canción es una de las razones por las que creo que Pulp fue una banda tan asombrosa: «Dishes», en ella Jarvis Cocker se abre completamente, nos deja sentir lo que él sentía, «I am not Jesus, though I have the same initials, I am the man who stays home and does the dishes». Se muestra sincero y común, vierte sobre las letras la conclusión final a su conflicto con la fama y su legado, con «I’d like to make this water wine but it’s impossible, I’ve got to get these dishes dry» nos dice que estuvo mucho tiempo tratando de hacer milagros con su vida pero al final la cotidianeidad siempre gana y solo queda describirla como es; al final nos queda saber que no tenemos una cruz qué cargar, por lo menos no esta noche.
Después llega «Party Hard», rompiendo la calma que deja «Dishes» con una guitarra llena de distorsión y un Nick Banks golpeando su batería con mucha fuerza. La letra habla de la desilusión cuando dejas de amar algo que amabas hacer, usando a la vida de fiestas y excesos como métafora de eso que alguna vez causaba euforia y placer y ahora solo produce pesar y desencanto; Jarvis Cocker probablemente se refería a estar en una banda, lograr tener éxito comercial y ser considerados una de las bandas más importantes y después perder la alegría de estar ahí.
«Help the aged, one time they were just like you, drinking, smoking cigs and sniffing glue», la primera linea que escuchamos de la siguiente canción, que aborda el tema central de todo el álbum: envejecer. El miedo está ahí, «In the meantime we try, try to forget that nothing lasts forever», Jarvis Cocker se da cuenta que ya cruzó el umbral que separa a los que aún pueden olvidarlo y a los que no, cuando el álbum se publicó él tenía 35 años y quizás ya podía ver hacia dónde nos dirigimos todos una vez que ya no podemos contarnos mentiras o fantasías para sazonar nuestros días y tratar de alejar nuestros pensamientos del final de nuestra vida: «And if you look very hard behind those lines upon their face, you may see where you are headed and it’s such a lonely place».
Pero no todo es tristeza y soledad, porque después sigue «This Is Hardcore», una vez más Nick Banks inicia golpeando con fuerza su batería pero esta vez suena más lento, más tranquilo, casi sensual, después aparece el piano y el ensamble de cuerdas, nos transporta a una especie de película francesa y Jarvis Cocker comienza a hablar/cantar lo que parece ser la primera vez que alguien tiene relaciones sexuales. El narrador describe la tensión física y mental que experimenta previo al encuentro, tiene todos los ángulos estudiados y después de mucha información obtenida por la pornografía, «I want it bad, I want it now, oh, can’t you see I’m ready now? I’ve seen all the pictures, I’ve studied them forever», sabe exáctamente qué hacer y cómo hacerlo. Jarvis Cocker lanza una frase que describe el momento justo antes de iniciar la experiencia: «This is the eye of the storm, it’s what men in stained raincoats pay for, but in here it is pure», nos pone directo en el contexto del narrador, en lo que el sexo y ese momento significan para él, para después descubrir incluso lo rutinario dentro del acto, «I’ve seen the storyline played out so many times before, oh, that goes in there, then that goes in there, then that goes in there, then that goes in there and then it’s over». Una de las letras más brillantes de Jarvis Cocker, donde muestra de manera magistral su talento para meternos en la situación, casi podemos sentir el calor de la habitación, oler el sudor y la ropa esparcida en el suelo.
Después viene un cambio de tema con «TV Movie», en ella el narrador describe su vida después de haber terminado una relación de pareja, «Without you my life has become a hangover without end, a movie made for TV: bad dialogue, bad acting, no interest, too long, with no story and no sex», continua reflexionando sobre sí mismo, se pregunta si quizás esa terrible sensación sea en realidad una debilidad de carácter, «Is it a kind of weakness to miss someone so much? To wish the day would go away, like you did yesterday». Esas preguntas no logran hacerlo sentir mejor, nada logra sacarlo de esa tristeza, ni siquiera logra formular alguna frase inteligente hasta que deja de fingir y es honesto consigo mismo, «Why pretend any longer? ‘cause I need you here with me, it’s obvious that I miss you so much so please say you’re gonna stay» pero solo está hablando al vacío, lo único que evita la completa oscuridad es el destello que produce la pantalla, la noche avanza y solo le queda esperar a que ella regrese o a que logre aceptar que ella nunca regresará.
Al iniciar la siguiente canción, «Little Soul», la música suena un poco más alegre y «britpoppy», el narrador parece ser un padre que abandonó a su hijo y trata de hablar con él, le pide que no sea como él a pesar que todos le dicen que se parecen. Muchos de los fans de Pulp piensan que habla del papá de Cocker.
Los ánimos cambian con la siguiente canción, «I’m A Man», un análisis satírico y casi cómico de los constructos que se necesitan para creer que alguien «ya es un hombre». Jarvis Cocker parece burlarse de los que avalan esta idea, «Your car can get up to a hundred and ten, you’ve nowhere to go but you’ll go there again».
Luego sigue «Seductive Barry» que considero como una especie de perspectiva alterna de la canción «This Is Hardcore», aquí el narrador también habla de sexo pero desde la fantasía que se lleva a cabo, la conexión que tiene con la otra persona parece más profunda, quizá se trate de alguien famosa por la frase «how many others have touched themselves whilst looking at pictures of you?», tal vez la canción en sí se trata de cumplir sueños y fantasías una vez que eres famoso.
La siguiente canción, «Sylvia», se siente como una que pudo estar en «Different Class» ya que los paisajes que describe suenan similares. En ella el narrador conoce a una chica y le dice que le recuerda a Sylvia, una mujer de su pasado, el narrador describe a Sylvia como una mujer bella, «her beauty was her only crime». Al recordarla también recuerda a los hombres con los que convivía, «Who’s this man you’re talking to? Can’t you see what he wants to do? He thinks if he stands near enough then he will look as good as you, he don’t care about your problems, he just wants to show his friends» y al hacerlo, se da cuenta que él tampoco fue una influencia positiva, «I guess I’m just the same as him, oh, I just didn’t know it then».
La primera edición del álbum cierra con dos canciones un poco similares, la primera es «Glory Days» la cual habla de la desilusión que se experimenta con la vida moderna, de como la revolución industrial nos llevó a un lugar como humanidad en el que «Oh, we were brought up on the Space-Race, now they expect you to clean toilets. When you’ve seen how big the world is, how can you make do with this?».
La última canción de la primera edición es «The Day After The Revolution», la cual también podría ser el final de «Different Class», Jarvis Cocker explora a la humanidad pero hablando directamente con el que está escuchando, «Oh, sorry, you haven’t heard? We are the children of the new world, if you’re quiet you can watch if you like, they say the future’s beginning tonight, whole empires will crumble, civilizations will fall», nos dice que la humanidad en conjunto seguirá dando vueltas en el ciclo de aristocracias vs el resto, «You will wake up to find that your whole life has changed, although nothing looks different, a revolution took place» para finalizar con un mensaje más positivo, sugiriendo que nos enfoquemos en nuestra propia vida ya que ahí está la verdadera batalla: «Why did it seem so difficult to realise a simple truth? The revolution begins and ends with you».
Hay otra canción que se incluyó en ediciones posteriores y que también fue parte del soundtrack de la película «Great Expectations» dirigida por Alfonso Cuarón, es una de las canciones más representativas de Pulp, una de mis favoritas de todos los tiempos y una de las canciones que no puedo escuchar todo el tiempo porque siempre me rompe, y se siente muy bien cuando lo hace, se llama «Like A Friend». Esta canción habla de alguien que al abrir la puerta de su casa encuentra a una persona de la que está enamorado pero no es correspondido, al parecer esa persona hizo algo que lastimó al narrador pero la interrumpe para dejarla entrar: «Don’t bother saying you’re sorry. Why don’t you come in? Smoke all my cigarettes, again»; esa frase de los cigarros es importantísima, nos deja ver que el narrador siente que siempre «sale perdiendo» cada que interactúa con esa persona pero no puede alejarla por lo que siente por ella. El narrador sabe que de este encuentro solo ella saldrá beneficiada, «Every time I get no further, how long has it been? Come on in now, wipe your feet on my dreams», sabe que ella no está ahí para hacerlo sentir mejor, está ahí para que él se encargue de cualquier problema que ella tenga en ese momento y después lo volverá a dejar, lo deja muy claro con todos los ejemplos con los que el narrador compara su relación con ella, «You are the last drink I never should drunk. You are the body hidden in the trunk. You are the habit I can’t seem to kick. You are my secrets on the front page every week. You are the car I never should have bought. You are the train I never should have caught. You are the cut that makes me hide my face. You are the party that makes me feel my age».
Sabe perfectamente que ese encuentro no llevará a nada, pero también sabe que no puede evitarlo: «Like a car crash I can see but I just can’t avoid. Like a plane I’ve been told I never should board. Like a film that’s so bad but I’ve gotta stay til the end. Let me tell you now, it’s lucky for you that we’re friends.»
La primera vez que de verdad escuché el «This Is Hardcore» yo estaba tirado en una cama sintiéndome miserable y perdido en la vida, pocas cosas mantenían su sentido y el mundo seguía girando indiferente a mi habitación, al colchón, al insoportable calor y a la confusión que ocurre cuando un mundo se hace trizas al reventar contra la cruel realidad. Minutos después se me ocurrió escuchar «The Fear» y después de varias horas me sentí extrañamente acompañado, escuchando el álbum completo una y otra vez durante los siguientes días, prestando toda mi atención a la letra y tratando de encontrarle significado. Supe que ya estaba enamorado del álbum cuando intentaba meterme en los zapatos del narrador de una u otra canción y no me costaba trabajo, sabía que alguien más había vivido los mismos problemas existenciales que yo y tuvo la claridad suficiente para escribir uno de los álbumes más importantes de la música.
El concepto de «This Is Hardcore» gira alrededor de vivir más allá de los treinta años y de repente darte cuenta que ya no eres joven, que quizás lo que hiciste no te llevó a donde querías y las consecuencias de ello; con eso muchos lo consideraron el último gran álbum del britpop y, aunque no tuvo mucho éxito en las ventas, aún sigue sonando y después de veinte años puedo decir que ha envejecido muy bien.