El valor de los demos me parece inconmensurable, pues es la primer impronta de lo que muchos músicos o bandas buscan, en cuanto a ideas y sonidos. En ocasiones, se quedan lejos de un sonido que posteriormente madurarían, otras veces, mantienen ese espíritu, pero de forma más profesional y mejor ejecutada, y otras tantas veces, se quedan solo en eso, en demos con una retahíla de ideas y aspiraciones, pero sea cual sea el estatus al que llegan, siempre hay algo especial en esos primeros intentos. Es ahí, donde guardan un extraño encanto.
A mi, particularmente, me gusta mucho el sonido Lo-fi, así como los experimentos musicales hechos con pocos recursos, lo que guarda el auténtico espíritu DIY. Si bien es cierto que hoy día, cualquier grabación casera puede tener un sonido bastante decente, y hay muchas formas de limpiar el sonido y hacerlo más profesional, en otras épocas, cuando para hacer una grabación decente era necesario ir a un estudio de grabación, los músicos sacaban sus demos como pudieran, muchas de las veces, grabándose de forma bastante precaria.
Cuando se encuentren un disco grabado con pocos recursos, de alguna época anterior o de algún músico que ofrece un producto del tipo, no lo aparquen por su aparente precariedad, uno puede encontrar verdaderas joyas. En ocasiones, la calidad de grabación podrían parecerle a mucha gente un impedimento para disfrutarlo, pero traten de dejar esto de lado, y disfrutarlo desde las ideas, desde la originalidad de los sonidos o hasta del desparpajo con lo que se realiza -esto, incluso lo aplico con géneros de los que no suelo ser afines, hasta para entender porque no son tan de mi agrado, o al contrario, para encontrarles valores por si mismo, o relaciones con otros géneros o tendencias-. Dicho todo esto, hablemos del álbum del cual les quiero hablar.
Hace muy poco, Buh Records, un valioso sello independiente con base en Lima, Perú y que se enfoca en escarbar entre sonidos experimentales, se dio a la tarea de editar y rescatar las grabaciones completas de Los Yndeseables, proyecto del músico Kimba Vilis, que comprenden el demo El Perfecto Ruido, y dos temas de estudio.
El nombre de Kimba Vilis es posiblemente muy poco conocido fuera de su territorio, pero dentro de Perú, el país del nacimiento del punk bastardo, es mejor conocido por ser parte de Leusemia, una banda representativa del movimiento punk hardcore de mediados de los ochenta, y es que de hecho, el material de Los Yndeseables quedaría en el limbo, eclipsado por la creciente y absorbente popularidad que fue obteniendo Leusemia y los posteriores proyectos de Kimba.
Los Yndeseables fue un proyecto musical activo entre 1984 y 1985 -o sea, su paso fue fugaz- en Lima. Bajo ese nombre, Kimba Vilis grabó en su habitación de forma totalmente casera, su demo ensayo, al que tituló El Perfecto Ruido, usando guitarras acústicas, un teclado a pilas, y sonidos de objetos caseros (latas, tubos, etc), y contó con la colaboración del bajista Mario Chirinos, conocido como Mario Almanegra, del grupo Zcuela Cerrada. Los temas son crudos, desnudos y llenos de desencanto, con un espíritu experimental y disonante, y que se orientaba hacia el post punk de la época.
Hacia fines de 1985 Kimba regrabó en el estudio Filderes dos temas en formato eléctrico para la compilación Vol 2, que reunía a una nueva ola de grupos subterráneos. Las canciones “Escapa del control” y “Asquerosa corrupción”, mostraban ahora a Los Yndeseables en un ejercicio de libertad creativa e imaginación sin precedentes para la escena limeña subterránea, con un punzante sonido de guitarra eléctrica disonante y una línea de bajo hipnótica, una base rítmica electrónica, que lo situaba a la vanguardia de su generación. “Escapa del control” ha sido desde entonces una canción de culto, versionada por nuevas generaciones, y sin duda una de las canciones esenciales del Rock Subterráneo en Perú.
Hablando sobre Los Yndeseables, Kimba señalaba: “Si tú quieres hacer algo y acomodarlo a la música no es necesario tener una Fender. Si quieres hacer algo no importa cómo lo hagas, sino que lo hagas.” Puro espíritu punk DIY.
Esta es la primera vez salen a la luz las grabaciones completas de Los Yndeseables. Échenle oreja a este documento histórico, uno de esos demos que guardan dentro de su precariedad de grabación, una inventiva y originalidad que bien valen la pena la escucha.