Cuenta la leyenda que cada determinado tiempo surge una agrupación, y si contamos con suerte, un par de bandas, que definen el rumbo musical a seguir para los próximos años. The Smiths es uno de esos maravillosos casos, junto a The Beatles, Dylan y The Velvet Underground, quienes cambiaron el curso de la música, siendo referenciados y reinterpretados por generaciones.
A principios de los años 80, dos géneros musicales, el synthpop y el new wave, dominaban las estaciones de radio, aprovechando los avances en la tecnología y la accesibilidad para interpretar música electrónica que dicho adelanto implicó.
La música en general parecía dirigirse hacia lo electrónico, incluido el experimental y sombrío post-punk, que terminó por adaptar ritmos más bailables a fin de encontrar un nicho accesible para el público.
La cultura anglosajona se saturó de una moda colorida, andrógina y fiestera, en la cual, únicamente las clase media y alta lograban pertenecer, creando un distanciamiento con la clase obrera, que juzgó a dicha escena de pretenciosa y vacía.
El 31 de agosto de 1978, en el Teatro Apolo de Manchester, se presentó la genial Patti Smith. Durante este evento Johnny Marr, de tan sólo 14 años conoció a un joven de 19, llamado Steven Patrick Morrissey. Al día siguiente Morrissey llamó a Marr para informarle que estaba interesado en formar una banda.
Ambos conectaron por su amor por la literatura, la poesía y la misma música. Morrissey veneraba a Oscar Wilde y a Jack Kerouac; Johnny Marr a Marc Bolan y Bert Jansch. Juntos pasaban horas escuchando a bandas tan disimiles como The Byrds y The Stooges.
Junto a Andy Rourke y Mike Joyce, formaron una banda que forjó un estilo particular, mezcla del rock británico de los 60, el glam-rock y el post-punk, con letras extravagantes, irónicas, íntimas y oscuras; música inspirada en la gente ordinaria. Creando temas que se concibieran identificables con su audiencia, con auténtica sinceridad, sin parecer ni sonar pretenciosos, llevando la música a nuevos niveles.
Las canciones de The Smiths exhiben a una Gran Bretaña que vivía una turbulenta transformación, en la que se buscaba el beneficio individual, lo que generó una sociedad de ejecutivos deprimidos, arrogantes y desarraigados nombrados yuppies. El llamado «progreso» neoliberal trajo consigo el desplome del mercado y a la abrumadora alienación del individuo.
En tan sólo 5 años y mediante 4 álbumes de estudio, The Smiths, nos brindó la certeza de que es válido sentirse desplazado e incomprendido, algo únicamente conseguido por Radiohead algún tiempo después.
Si bien no fueron tan populares como se podría pensar, su base de seguidores es amplia y extraordinariamente dedicada. Es una banda referente, el grupo favorito de tu músico preferido. Su legado trasciende generaciones y ha inspirado a artistas como: Jeff Buckley, Radiohead, Belle and Sebastian, Suede, The Sundays, Coldplay, The National y The Decemberists, por mencionar a algunos.
La música de The Smiths es, en palabras del escritor Mark Simpson, «tan embriagadoramente melancólica, tan peligrosamente reflexiva y tan seductoramente divertida que atraía a su oyente».
«I decree today that life
Is simply taking and not giving
England is mine, it owes me a living»