VIOLÉTICA

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Una canción coral

El pasado 15 de junio fue lanzado Violética, el nuevo trabajo de Nacho Vegas. Se trata de un disco doble con dieciocho temas. Hay una clara intención del asturiano por hacer un recuento de sonidos, texturas y temáticas que ha explorado a lo largo de su discografía, casi como si se tratase de una recopilación. Esto lo convierte en un disco arriesgado: puede atraer por la nostalgia de escuchar atmósferas que creímos nunca volverían, y puede repeler por el exceso de autorreferencia.

La producción corre a cargo del ya clásico Paco Loco. En la música lo acompaña su banda actual, Abraham Boba, Edu Baos, Manu Molina, Joseba Irazoki, Luis Rodríguez y César Verdú. Como invitados, aparecen el coro antifascista Al Altu La Lleva, la dulce voz de María Rodés, la entrañable Christina Rosenvinge y un sorpresivo dueto con Christina Martínez. Todo lo anterior, más un guiño a la gran Violeta Parra conforman este nuevo trabajo, que alcanza en algunos momentos las puntas más altas de su carrera.

PRIMERA PARTE

1.- «El Corazón Helado»

Perfecta para abrir y anunciar la búsqueda del disco, un camino entre lo político y lo personal, entre el rock y lo popular. La letra es un poema de los hermanos Manolo y Aurelio Caxigal, guerrilleros asturianos que fueron asesinados durante la posguerra, en el que narran su cotidianidad en la lucha armada. Aunque el fraseo recuerda fuertemente a «Gallo Negro, Gallo Rojo», una vez que se tiene la referencia y el contexto, el tema se aprecia con mayor fuerza.

2.- «Ser Árbol»

Una canción de amor [en un sentido amplio] en el que se tiende una parábola con elementos naturales. La voz de Nacho, serena, es acompañada por la voz de María Rodés, y juntas se mueven sobre una base de guitarras acústicas, hipnóticas como ramas de árboles al viento. Una de las joyas más brillantes del disco, sin duda.

3.- «Bajo El Puente De L’Ará»

Una crónica noir con una pegajosa melodía que recuerda a temas como «El Fulgor» o «Serie Negra». No hay mucho más que decir: será la preferida de los melancólicos y resultará un poco repetitiva para los que celebran la evolución.

4.- «Todos Contra El Cielo»

Un tema singular por su estilo: cumbia. Si en «Libertariana Song» se había aproximado a los ritmos latinos, en esta ocasión lo hace con mayor contundencia. La letra social [impecable] contrarresta lo anti solemne de la música y crean un excelente tema.

Para los curiosos recomiendo escuchar «Siempre Es La Misma Situación» de La Sonora Skandalo. Tómenlo con humor.

5.- «Desborde»

A medio camino de esta primera parte encontramos uno de los platos fuertes del disco. Una hermosa balada que recuerda [favorablemente] a temas como «Cerca Del Cielo». La letra es de una belleza implacable, volvemos a encontrar los versos de «Runrún» que dicen ‘Nos quieren en soledad, nos tendrán en común’. Una de las mejores canciones no sólo del disco, sino de su carrera.

6.- «Las Palabras Mágicas»

Una balada que se queda corta frente al tema que le precede. En la música es difícil lidiar con el efecto deja-vu que nos recuerda, casi acorde por acorde a «Hablando De Marlen», con algunos tintes de «Canción Para La PAH». La letra, originalmente era un poema incluido en su más reciente libro Reanudación De Las Hostilidades.

7.- «Crímenes Cantados»

Otro plato fuerte, un tema crudo y potente. La música recuerda a las atmósferas de The Jesus And Mary Chain. La letra relata a manera de artículo periodístico la historia de dos víctimas de Centros de Internamiento para Extranjeros [CIE]: Samba Martine que falleció dentro de uno de estos centros de manera inexplicable y Mohamed Bouderbala quien se ahorcó en su celda. La frase de ‘Morirá la verdad, si no podemos cantar que lo que llaman suicidio, en realidad fue un asesinato’ queda retumbando con fuerza. Uno de los cortes más políticos del disco.

8.- «La Voz Tomada»

Pasa algo similar que con «Las Palabras Mágicas»: el corte que le precede es demasiado potente y da la sensación de quedarse corta. Aunque tiene algunos momentos interesantes y frases memorables como ‘No encuentro más solución / que ser una más entre las voces rotas / que en cada derrota / rompe aún más la voz’ pasa ligeramente desapercibida en esta colección de canciones.

9.- «Todo O Nada»

Una forma bellísima de terminar esta primera parte. Un tema rescatado de La Vida Es Dulce aquel homenaje al cineasta Mike Leigh, del que ya había rescatado «Indefensos» para abrir Resituación y un corte más que encontraremos en la segunda parte de Violética. Una letra enigmática en la que no sabemos exactamente de qué o quién está hablando, sin embargo, nos queda claro que ‘aunque estés hasta el cuello de lodo’ todo continúa ‘y sin embargo se mueve’. Un melancólico clarinete acompaña la hundida voz de Nacho con los angelicales coros de María Rodés fundiéndose en un lento fade out que nos deja el mejor sabor de boca para tomar un respiro y comenzar la segunda parte del viaje.

SEGUNDA PARTE

1.- «Maldigo Del Alto Cielo»

Abre el disco con fuerza, de nuevo un tema entre lo político y lo personal, entre el rock y lo popular. Aunque sabíamos que el disco rendiría un homenaje a Violeta Parra, esta versión supera las expectativas. La voz de Nacho se acompaña casi en todo momento por la segunda voz de Christina Rosenvinge. Captura toda nuestra atención para escuchar con entusiasmo esta segunda parte.

2.- «Un Ejemplo De Discreción»

Un tema muy a la manera de La Zona Sucia, pero mucho más débil. Breve, acústico, con una melodía dulzona y una voz triste. La letra no supera el divertimento. Si tuviéramos que señalar un tema de relleno, este sería el indicado.

3.- «Ideología»

Un tema largo, con una atmósfera fuerte. A primera impresión recuerda a «Cómo Hacer Crac» y «El Mercado De Sonora», sin embargo, rápidamente se desprende con su propia personalidad. El estribillo es de una potencia extraordinaria. La voz de Nacho particularmente seria y cruda es acompañada por el coro antifascista Al Altu La Lleva. La letra, como su título lo indica, es una crítica a la ‘ideología’ hueca y consumista que nos rodea y asfixia en estos tiempos.

4.- «La Última Atrocidad»

Un corte que recuerda a la época de Verano Fatal, sorprende en realidad que no sea Rosenvinge la convocada para este tema, sino Cristina Martínez. La letra ejemplifica una discusión de pareja en la que la súplica de amor y el sarcasmo hiriente se funden de manera indivisible.

5.- «Los Sabios Idiotas»

Llega otro tema rescatado de La Vida Es Dulce, cinematográfico por naturaleza. Un bello fade-in nos introduce a la narración de un pasado agridulce, en el que la frase ‘Eran tantas las cosas que nos unían en aquellos días’ se encaja con su melancolía en nosotros cada vez que Nacho la pronuncia.

6.- «Tengo Algo Que Decirle»

El contraste entre la cálida musicalización y la letra política genera uno de los temas más geniales del disco. Nacho somete a un delegado del gobierno y le canta ‘le guste o no’ las cosas que todos quisiéramos decirle. Hay una suerte de venganza que, sin perder el sentido del humor, reivindica a cualquiera que escuche esta canción.

7.- «[Pasamos] El Negrón»

Un tema misterioso, que se divide abruptamente en dos. La primera parte resulta de una belleza incuestionable, hasta que se ve interrumpida por un coro que rompe la secuencia rítmica de manera radical. Ya que ‘El Negrón’ es un túnel que comunica León con Asturias, desconozco si este abrupto cambio tenga una justificación regional. Una bella melodía de cualquier manera.

8.- «Aida»

Un tema breve, basado en una canción popular que habla de Aída de la Fuente, una guerrillera asesinada durante la Revolución de Asturias de 1934. Como último recorrido por los sonidos de su discografía este tema nos recuerda a las Canciones Populistas. Pareciera un tema perfecto para cerrar el disco con broche de oro, pero aún falta la carta mejor guardada de Violética.

9- «A Ver La Ballena»

El último tema del disco, el más extenso tanto en música como en letra, el más brillante también. Una crónica, mitad verdad y mitad ficción, que entrelaza la historia de una ballena varada en la playa de San Lorenzo, Guijón en 1984, con otra ballena recién varada en el lapso en que Nacho escribía la canción, más la especulación del origen del dicho popular español que versa ‘A ver la ballena’. Un estribillo tipo vals con intervalos de narración caótica en los que además de contarnos la macabra historia de la ballena devorada, se reflexiona sobre la ambición, el capitalismo, la histeria colectiva, la falta de empatía, y lo fácil que resulta olvidar los desastres sociales para convertirlos en motivo de celebración banal. Un tema espectacular y redondo por donde se le mire. La mejor manera de cerrar el disco y un tema imprescindible desde ahora en su repertorio.

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Violética es un disco largo con distintas capas de profundidad, en él se mezclan todos los intereses que su autor ha explorado a lo largo de su carrera. Nacho Vegas es hoy en día, uno de los cantautores en lengua hispana más importantes del mundo. Con Violética, su séptimo trabajo en solitario consolida este puesto y nos demuestra que se encuentra en plena condición para seguir sorprendiéndonos.