Yo no sabía nada de Cloud Nothings hasta que escuché «Fall In» en alguna parte y poco a poco fui orbitando hacia ellos, cuando por fin pude apreciar el álbum por completo me enamoré. Es cortito, agresivo, introspectivo y muy honesto en sus letras, o al menos eso me hizo sentir mientras yo pasaba por una más de esas microdecepciones que a veces da la vida y encontré en el Attack On Memory el refugio que necesitaba para darle un poco más de claridad a cosas que descubría de mí y quizás no me gustaban tanto.
Un año antes de AOM los Cloud Nothings eran Dylan Baldi en todos los instrumentos en el estudio y en vivo lo acompañaban TJ Duke en el bajo y voz, Jayson Gerycz en la batería y Joe Boyer en la guitarra (en el 2013 dejó la banda). La historia musical de Cloud Nothings ya contaba con dos álbumes de un rock que llegó a ser catalogado como power pop, lofi rock, indie, y todas esas otras etiquetas que abundaban durante la primera mitad de la década de los 2010’s. Determinado a lograr un cambio en su sonido, Dylan Baldi se mete al estudio junto a su banda para ya no ser el único que graba los instrumentos y también los deja entrar en el proceso creativo, con Steve Albini en alguna parte detrás de las consolas de su Electric Audio en Chicago, y el 24 de enero del 2012 se publica en Carpark Records.
El estilo musical de este tercer disco puede sentirse como una mezcla de punk, rock, hardcore, grunge, de variantes del rock que buscan dar a entender su mensaje con gritos, tanto de los instrumentos como del cantante. Una de las características principales es que el disco empieza con «No Future/No Past», una especie de marcha para gente que ya no quiere ser arrastrada por recuerdos ni por sueños que ya no podrán materializarse, para después meterte a «Wasted Days» (que quizás sea un gran candidato para la categoría «track no. 2 más sobresaliente de los últimos tiempos») una canción de esas largas que poco a poco van acumulando momentum y al final explotan.
El cambio de estilo musical se escucha enseguida también en las letras, usando la fórmula de «escribir poco, decir más» la tonalidad es de alguien frustrado, decepcionado, que señala sus errores con cierto hartazgo. Para mí, Attack On Memory fue la manera que conocí a una de las bandas que más amo, su discografía entera es increíble y siguen siendo un punto de referencia para la música en general.