El encuentro con la psicodelia
The Seeds se habían labrado una reputación en el sonido garage, pero como muchas otras bandas, con la llegada del psicodélico 1967, se verían tentados a experimentar con sonidos más elaborados y ácidos.
Es así que tras un exitoso año para ellos, como lo fue 1966, que había sido testigo de dos exitosos lanzamientos de la banda, deciden ir más alla, y aventurarse en su tercera entrega en un álbum más ambicioso, con la complicidad en la producción, de Marcus Tybalt, y el resultado llevaría por nombre Future, una obra magnífica, que no obstante, ha sido un poco menospreciada a pesar de ser un trabajo imprescindible en la discografía de The Seeds.
El disco. Lado A.
El álbum inicia con ‘Introduction’, un momento hablado que da paso a la pegajosa ‘March of the Flower Children’, un track ácido de sonidos juguetones donde se asoma una guitarra hindú. La experimentación psicodélica sigue en la viajada ‘Travel with Your Mind’, con excelentes texturas, un excelente bajo, y ese brillante toque oriental concentrado en una base de sonidos raga.
Llega otro momento excelente con ‘Out of the Question’, donde presentan elementos más garage, muy en la onda de lo que habían hecho en sus anteriores entregas. Tras esta mirada al comienzo musical de la banda, llega ‘Painted Doll’ un corte no tan afortunado, o mejor dicho, definitivamente una canción que no debió ser incluida.
Después de este momento tedioso, la psicodelia vuelve a hacer acto de presencia, esta vez en ‘Flower Lady & Her Assistant’, envuelta en el sonido del arpa, que le da un plus al viaje. ‘Now a Man’ es una joyita, así de simple. Cada elemento fluye a la perfección. La canción avanza de manera precisa con una melodía magnifica, que convierte esta canción es uno de los mejores momentos del álbum. Este corte es uno de los dos que fueron compuestos por el líder y guitarrista, Sky Saxon, el también guitarrista Jan Savage, además de el organista y ejecutante de el citar, Daryl Hooper. Cabe comentar que la parte de composición y arreglos en toda la obra, fue una tarea de Saxon y Hooper.
El disco. Lado B.
Los Seeds retornan nuevamente a su anterior sonido en el single ‘A Thousand Shadows’. ‘Two Finger Pointing At You’, presenta una sección rítmica aplastante, con un bajo preciso que acompaña esa batería magnífica y contundente. En este corte, la psicodelia se enriquece con el sonido de una tuba. Otra joyita.
El bajo potente sigue presente en ‘Where is the Entrance Way to Play’. Psicodelia muy en la línea folk, que se rompe cuando instrumentos como el citar hacen acto de presencia en ‘Six Dreams’, otro corte ácido que suena bastante bañado en LSD. Este viaje nos conduce al final del álbum con ‘Fallin’, track de más de siete minutos de viaje lisérgico que cierra de manera estupenda un álbum magnífico que merece ser escuchado por quienes se digan amantes de la psicodelia y de la buena música en general.
*Este artículo salió publicado por primera vez en Nopal Eléctrico Radio.